Usemos condón...

A algunas personas les preocupan las infecciones sexuales pero al mismo tiempo poca gente utiliza preservativo (sí, las farmacias lucran con ellos, pero como ¡salvan la vida!). No quieren ser padres ni madres pero dejan de lado un método anticonceptivo.

Como si las palabras “pololear”, “salir” o “tener una relación” eliminaran cualquier posibilidad de contagio o la historia corporal de cada unx de nosotrxs o impidiesen la fecundación.

Informarnos acerca de los hongos, bacterias, virus que danzan por nuestros cuerpos y tomar las precauciones necesarias puede evitarnos muchos tratamientos innecesarios e intervenciones médicas invasivas. Podemos tomar las riendas sobre el control de nuestra maternidad y paternidad con base a nuestros intereses, tiempos, posibilidades y sueños. Existen distintos métodos para evitar un embarazo, pero también están las opciones de emergencia, si te falla alguno de éstos.

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¡Por un placer que no nos mate: cuidémonos!

Sexualidad no es lo mismo que reproducción:

¡dejemos de engendrar como producción en serie!